Gilda Sánchez

Cómo cuidar a los loros en cautiverio 2/2


Comparte en tus redes sociales

Facebooktwitter

• Como todos los animales silvestres, estos hermosos animales nacieron para ser libres y volar sin las ataduras del ser humano. Los loros no nacieron para ser mascotas y a menudo sufren mucho por estrés o malos cuidados por parte de sus amos. Sin embargo, si ya tienes un lorito, a continuación te damos unos breves consejos, ya que es uno de los animales que más sufren en cautiverio.

Decrease Font Size Increase Font Size Tamaño del texto Imprimir esta página

loroEn la nota anterior, la primera parte de Cómo cuidar a los loros en cautiverio, explicamos conceptos importantes para tratarlos y cómo alimentarlos. Enseguida continuamos con otras consideraciones para su cuidado.

La jaula debe tener suficiente espacio como para que el ave estire completamente sus alas, sin rozar con ningún barrote; de preferencia no deben ser redondas, ya que estas, provocan inseguridad a los loros y deberá estar pegada a la pared, o en un rincón, donde el ave pueda estar segura que nadie la va a sorprender. La jaula es indispensable para un loro, los palos o torres de palos para estancia, no aportan una superficie amplia como las paredes de la jaula, las torres son para que pase espacios cortos de tiempo y se des aburra, pero no para que viva en ellas; el sentimiento de encierro, es plenamente humano.

La jaula deberá situarse en el lugar donde haya más movimiento durante todo el día, pero no deberá estar en la cocina, ya que las aves son muy sensibles a los olores y las sartenes de teflón desprenden gases tóxicos para las aves y el piloto apagado de una estufa, lo puede intoxicar; los olores fuertes de pintura, thiner, desodorantes de ambiente, aceite hirviendo, etc. También son tóxicos para ellos.

El loro deberá tener cuando menos una visita al veterinario al año y si es posible, hacerle algunas pruebas de laboratorio como examen coprológico y biometría hemática. Los loros son activos y juguetones, cualquier cambio en su actitud, inactividad o falta de apetito, puede ser indicativo de enfermedad.

No trates de educar a un loro como a un perro o un gato, gritar o pegar a un loro es contraproducente, en su lugar, ignórale, mírale en forma directa y firme y dile en voz alta “NO”, pero sin gritar. Casi todas las especies de loros tienen capacidad de hablar, incluso los periquitos australianos y las ninfas, aunque no todas tienen la misma facilidad para hacerlo.

Tener, criar y cuidar a un loro es como tener a un niño de 2 años gateando por toda la casa, así que debemos tener mucho cuidado con él. Es común cubrir la jaula con algún trapo o lona para que descanse y nos deje un rato tranquilos de tanto charloteo, pero en ocasiones al morder la cubierta puede soltar hilos que se enredan en sus patas y le pueden ocasionar un daño severo o hasta perder el miembro. Lo mismo ocurre cuando le ponemos juguetes o perchas de hilo, las cuales se enredan en sus uñas y pueden ser amputadas.

En cuanto a juguetes, debemos ponerle juguetes adecuados a su tamaño, ya que una cadena grande o chica, puede ocasionar daño en sus patas o si le ponemos botones de plástico, al morderlos lo pueden quebrar y tragar una parte, que le puede ocasionar obstrucción intestinal o perforación de buche y/o intestino.

Recuerda una correcta alimentación, aportará una vida más larga y sana de tu loro, preparándolo para soportar tanto los cambios climáticos al no estar en su hábitat natural, así como enfermedades al tener su sistema inmunológico sano y sus defensas altas.

Algunas consideraciones especiales son las siguientes:Yacos

Los Yacos necesitan más aportes de grasa, por lo cual es bueno facilitarles nuez de palma, añadirles de cuando en cuando aceite de palma en la macedonia y mezclar bien.

Los Amazonas tienen tendencia a engordar, así que hay que tener especial cuidado con los alimentos grasos, como pueden ser los frutos secos (semillas y cacahuates).

A los Periquitos, Forpus, Ninfas y Agapornis hay que darles con más frecuencia verduras, en vez de frutas.

En los Loris, es esencial que tomen néctar, que su dieta esté compuesta básicamente de frutas maduras y dulces, y muy poca cantidad de alimentos secos.

Las Cacatúas tienen tendencia a engordar, por eso se les deben de vigilar las grasas. Para el Eclectus la fruta seca tiene que componer gran cantidad de su dieta.

Los Pionites también necesitan del néctar (como los Loris) pero en menor cantidad.

Los You-Yous, por su parte necesitan más aporte de grasa, como los Yacos.

Ante cualquier cambio de actitud, inapetencia, falta de actividad y de jugueteo, no dudes el llevar a tu loro al veterinario de tu confianza, antes de que sea demasiado tarde.

Facebooktwitter

¿Tú que opinas? ¡Nos interesa mucho saberlo!