Breves cuentos budistas / el segundo: La taza de té
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Hoy te compartimos el segundo relato de la tradición budista que nos dicen mucho para no perder nuestra armonía emocional…
- Hoy te compartimos el segundo relato de la tradición budista que nos dicen mucho para no perder nuestra armonía emocional…
El budismo nos enseña no sólo debemos cultivar el amor y la bondad, sino que necesitamos tratar de desarrollar nuestra capacidad intelectual para alcanzar un claro entendimiento.
La taza de té
“El profesor llegó a la casa del maestro zen y se presentó haciendo alarde de todos los títulos que había conseguido en sus largos años de estudio. Después, el profesor comentó el motivo de su visita, que no era otro que conocer los secretos de la sabiduría zen.
En lugar de darle explicaciones, el maestro le invitó a sentarse y le sirvió una taza de té. Cuando la taza rebosó, el sabio, aparentemente distraído, siguió vertiendo la infusión de manera que el líquido se derramaba por la mesa.
El profesor no pudo evitar llamarle la atención: “la taza está llena, ya no cabe más té”, le advirtió.
El maestro dejó la tetera a un lado para afirmar: “Usted es como esta taza, llegaron colmados de opiniones y prejuicios. A menos que su taza esté vacía, no podrán aprender nada”.”
Este cuentito nos enseña que con una mente llena de prejucios es imposible aprender y tomar en consideración nuevas creencias.
Es necesario que los viejos preceptos dejen de estar en nuestra mente, “vaciarnos” de ellos para poder estar abiertos a nuevas enseñanzas.
