El envejecimiento cerebral ya no se asocia con la edad
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• Nuevos estudios confirman que el cerebro envejece más por problemas circulatorios que por degeneración de neuronas. En condiciones mentales saludables la acumulación de conocimientos llega a su pico en la séptima década de vida al igual que la amplitud del vocabulario y la acumulación de conocimientos.
Se ha constatado científicamente que los cambios en el cerebro a medida que envejece pueden deberse a problemas vasculares (en los vasos sanguíneos), en vez de a problemas en la actividad neuronal propiamente dicha. Los estudios señalan que el envejecimiento del cerebro humano es menos neuronal y menos de lo que se ha venido creyendo hasta ahora, y que los cerebros viejos pueden ser más parecidos a los jóvenes que lo asumido con anterioridad.
Aunque desde hace tiempo se sabe que nuestra capacidad de pensar con rapidez y aprender con relativa facilidad, conocida también como inteligencia fluida, alcanza su máximo a la edad de 20 años y después empieza a disminuir. Hallazgos recientes, incluyendo un estudio hecho por neurocientíficos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y el Hospital General de Massachusetts (MGH), señalan que este envejecimiento es más complejo.
Se encontró que la inteligencia fluida alcanza su máximo a edades distintas, algunas incluso a los 40 años. A cualquier edad, estamos mejorando en algunas cosas, empeoramos en algunas otras y estamos estancados para otras más. No hay probablemente ninguna edad en la que alcancemos un máximo en la mayor parte de las habilidades mentales, y con toda certeza no hay ninguna en la que lo consigamos con todas.
Dos investigadores, Germine y Hartshorne aunaron fuerzas para conocer a qué edad se alcanza el pico máximo en diversas clases de 
habilidades intelectuales. Obtuvieron datos de 50.000 sujetos de estudio, y encontraron que cada habilidad cognitiva que estaban estudiando alcanza su máximo a una edad distinta.
Respecto a lo que se conoce como inteligencia cristalizada (la acumulación de conocimientos), los nuevos estudios reafirman que llega a su pico hacia el final de la vida, como se creía previamente.
Germine y Hartshorne encontraron algo inesperado: si bien el vocabulario tiende en muchos casos a alcanzar su amplitud máxima poco antes de cumplir los 50 años, en algunas personas esto sucede poco antes o poco después de cumplir los 70.
Probablemente de acuerdo a los investigadores esto podría ser el resultado de una educación académica más robusta, el hecho de tener un actividad que requiera leer mucho y tener que manejar muchos conocimientos. Todo ello significa que la existencia de buenas oportunidades para la estimulación intelectual cuando se entra en la tercera edad se convierte en una ventaja en cuanto a la capacidad cerebral amplificada vocabulario tiende en muchos casos a alcanzar su amplitud máxima en esta época de la vida.
