Los extremos de la vida
• Imagen elocuente del significado de la madurez frente a la inocencia reflejados en la miradas de una anciana que abraza a su recién nacido vástago.
En realidad no sabemos a ciencia cierta el motivo o las relaciones que hay detrás de esta fotografía.
¿Es la abuela? ¿La bisabuela? ¿Una anciana que quiso tener en sus brazos, aunque fuera por un momento, un pedacito de futuro?
Lo que si podemos comentar son las múltiples reflexiones a las que nos llama: una mujer, de 101 años de edad, posa junto con un pequeño de apenas minutos de nacido.
La imagen del inexorable paso del tiempo que, mientras por un lado muestra la experiencia y la serenidad de unos ojos que han visto pasar un siglo frente a ellos, por el otro, la promesa fresca y lozana de un futuro que, como todos, queremos que sea prometedor.
La foto fue publicada en las redes sociales del Life Or Dad y originó una gran afluencia de visitantes. Llama la atención que no es la clásica foto a la que nos tiene acostumbrado Internet (gatos o memes); tan solo los dos extremos de la vida.
Una foto que, definitivamente, llama a la reflexión.