Un baile de Tongolele detenía el corazón de los caballeros…
Los tiempos y los preceptos morales cambian. ¿Qué pasará en el 2025? ¿Quiénes serán los referentes? Como señal de los tiempos, para entonces, la gente se reunirá para escuchar pláticas de couching
Un baile de Tongolele detenía el corazón de los caballeros que iban a escondidas a verla
“No juzgo, solo comento. Al paso del tiempo, lo que una vez fue vulgar se vuelve tendencia y los personajes de arrabal se convierten en riqueza histórica.
¿Quién iba a pensar, en los años 50s, que Ninón Sevilla o Tongolele se convertirían en personajes de culto? La sociedad de la época las tenía por “pecadoras”, “exhibicionistas” y un término que suena delicioso: “mujeres de vida licenciosa”. Un baile de Tongolele detenía el corazón de los caballeros que iban a escondidas a verla, diciendo que tenían una reunión de trabajo.
Para los 60s, esos referentes eran Zulma Faiad, Wanda Seux y Lyn May. Las rumberas se volvieron ficheras y pasaron a ser llamadas “roba maridos”. En los 70s, Angélica Chain y Olga Breeskin y su violín, que pronto darán conferencias sobre política y cultura, no lo duden, porque nos encanta; muchas de ellas hoy son fanáticas del espiritualismo y de religiones alternativas, así que no pasarán muchos años antes que hablemos de ellas como símbolo social o personajes de avanzada.
Los tiempos y los preceptos morales cambian. ¿Qué pasará en el 2025? ¿Quiénes serán los referentes? Como señal de los tiempos, para entonces, la gente se reunirá para escuchar pláticas de couching, superación personal o yoga musulmana de un viejito llamado Latin Lover.