Gilda Sánchez

Los tips más inteligentes para comer saludable


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• Michael Pollan (autor de libros de éxito como «El detective en el supermercado» y «El dilema del omnívoro») ha vuelto a escribir sobre comida y ésta vez para tratar de hacer más fáciles las opciones más inteligentes para comer saludable.

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comida-saludableAhora sabemos la importancia que tiene la comida para evitar enfermedades. Por esto mismo comer se vuelto muy complicado…innecesariamente», afirma el autor en «Saber comer. 64 reglas básicas para aprender a comer bien» (editorial Debate).

Pollan  nos dice que ya no miramos la comida sino vemos en ella carbohidratos, gluten, grasas, nutrientes, etcétera. Sin embargo, tener una sana alimentación no quiere decir aburrirse en la forma de comer.

Su consejo más importante:  «Come comida. Con moderación. Sobre todo vegetales».

Este es su planteamiento principal el que desarrolla en 64 sencillas normas que apuntan a que debemos alejarnos en la medida de lo posible de la dieta occidental. Esta dieta, según el periodista, consiste en «muchísimos alimentos procesados y muchísima carne, muchísimos azúcares y grasas añadidos, muchísimos cereales refinados, muchísimo de absolutamente todo menos verdura, fruta y cereales integrales».

Sus principales sugerencias son:

  1. No comas nada que no comería tu bisabuela. Cada año aparecen 17.000 nuevos productos en los supermercados. Pero según Nollan no todos pueden calificarse como alimentos, algunos son más bien «sustancias comestibles con aspecto alimenticio». Motivos para evitarlos: aditivos químicos y de los derivados del maíz y la soya, plásticos de sus paquetes… No adquieras nada que tu abuela o bisabuela no hubiera reconocido como comida a un primer vistazo. ¿Es eso un postre de gelatina, pasta de dientes o plastilina transparente?
  2. Cuidado con los productos «light», desnatados o bajo en grasas», así como los «saludables». Michael Pollan asegura que quitar la grasa de los alimentos no los convierte necesariamente en adelgazantes. También advierte de que «demonizar» a la grasa hace que le demos vía libre a otro nutriente supuestamente bueno, los hidratos de carbono. «Más vale comer la versión auténtica con moderación que hincharse del producto light (atiborrado de azúcares y sal)
  3. Prefiere los mercados tradicionales y los productos de temporada. Si procede de una planta puedes comerlo, si lo han fabricado en una planta, no. Si te lo sirven por la ventanilla del coche no es comida.
  4. Los vegetales deben ser tu alimento principal, en especial los que tienen hojas. Si la base de tu dieta son las frutas y verduras reduces el consumo de calorías, ya que los vegetales suelen ser menos energéticamente densos que otros alimentos. «Los vegetarianos suelen estar más sanos que los carnívoros, y viven más años», recuerda Michael Pollan. Imagina que la carne es una guarnición o un alimento para ocasiones especiales. No hay que eliminar la carne de la dieta, sino moderar su consumo como hacen los flexitarianos (casi vegetarianos, solo comen carne un par de veces por semana).
  5. Comida basura puedes consumirla si tú la cocinas. Michael Pollan recuerda que hasta que la industria no se hizo cargo de todo el proceso de hacer unas patatas fritas (lavar, pelar, cortar, freír, limpiar) no se habían comido tantas. Así que, todo lo que estés dispuesto a cocinar tú mismo será una buena cantidad. Seguro que inferior a la que consumirías comprándolas.vino en la cena
  6. Una copa de vino con la cena. «Beber un poco todos los días es mejor que mucho el fin de semana y beber con las comidas es mejor que con el estómago vacío». Le damos la razón a siglos de sabiduría tradicional y anecdotario popular.
  7. Quédate con un poco de apetito al comer. En muchas culturas, no en la nuestra, se aconseja expresamente dejar de comer antes de llegar a ese punto de estar lleno. Los japoneses creen que cuando se llega al 80 por ciento es el momento ideal, en la India es al 75 por ciento y los chinos al 70 por ciento.
  8. Come despacio. Pueden pasar hasta 20 minutos antes de que el cerebro se entere de que tenemos el estómago lleno; eso quiere decir que, si tardas menos de 20 minutos en acabarte la comida, la sensación de satisfacción llegará demasiado tarde y ya no te servirá de nada. Además es importante saborear los alimentos. Los indios tienen un proverbio que dice «Bebe la comida y mastica la bebida». Debemos pasar tanto tiempo disfrutando la comida como el que ha tardado en prepararse. Y… déjate algo en el plato.
  9. Ocasionalmente date un capricho e infringe alguna regla. Según Pollan no hay que obsesionarse con ellas. Hay que cultivar una actitud relajada ante la comida y tener en cuenta que hay ocasiones especiales en las que se pueden pasar por alto.

 

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