Gilda Sánchez

El cine también se disfruta sin compañía


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Ir sin compañía al cine permite un acto espontáneo, no necesariamente agendado y calculado. Es decir, cualquier día, en cualquier momento, por ejemplo a la hora de la comida para despejarse.

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“¿Quieres ir sólo al cine?”. “¡Qué deprimente!”. “¿No te da pena que piensen que no tienes a nadie con quién ir?”. Estas son algunas de las expresiones que muchas personas suelen hacer respecto de quienes asisten sin compañía al cine y por las que muchos no se han decidido a vivir la tal experiencia. Existen también otro tipo de comentarios prejuiciosos específicamente para las mujeres como “una mujer decente no va sola al cine”, “y si se te acerca un desconocido”.

auditorium with one exclusive seatGracias a esa clase de prejuicios de los cuales aún en estos tiempos sufrimos, un gran número de personas, y principalmente las mujeres de ciudades pequeñas se han privado de las muchas ventajas que tiene el ir solo o sola al cine, las cuales expondremos para que no desaproveches el próximo estreno de esa película que tanto quieres ver sólo porque no tienes con quien ir y termines por verla meses después, solo o sola, en tu casa.

Ir sin compañía al cine permite un acto espontáneo, no necesariamente agendado y calculado. Es decir, cualquier día, en cualquier momento, por ejemplo a la hora de la comida para  despejarse y volver al trabajo con nuevos bríos. En cambio, si uno no puede ir al cine más que acompañado, empieza la búsqueda desgastante por encontrar a un cómplice: uno no puede ir sino hasta el próximo fin de semana y después de las ocho de la noche. El otro ya le había prometido a su esposa ir a ver esa película juntos, y el que nos había dicho que sí, cancela a última hora porque le salió una junta urgentísima.

Cuando la decisión de ir al cine es sólo por el placer de ir sin que haya una película en especial que nos motive, hay que negociar y consensuar la selección poniendo en riesgo lo satisfactorio de la experiencia. El riesgo aumenta en la medida en que crece el número de personas que irá al cine, ya que hay que encontrar primero, la ubicación que a todos les convenga, luego un horario pertinente, la y la película que ninguno haya visto. Normalmente la película que nadie ha visto es precisamente la que nadie ha querido ver por ser muy mala. En este caso, si lo que buscamos es convivir con un grupo de amigos, lo mejor es optar por un lugar en el que unos y otros se puedan ver y conversar.

Otra ventaja de ir solos al cine es que casi sin excepción encontraremos un boleto y justo en el lugar en el que uno se quiere sentar.

girl in an empty cinemaAdicionalmente, asistir sólo al cine garantiza que podamos prestar mayor atención en la película, pues a mayor el número de personas, mayor la probabilidad de interrupciones. La gente que va acompañada al cine quiere compartir sus ideas, sus expresiones de admiración, su comida y hasta el suéter. La convivencia genera tal distracción que nos permite meternos de una vez por todas en la película.

En cuanto a los prejuicios acerca de ir solos al cine, cabe destacar que todas las razones para no ir al cine solitariamente dejaron de ser aplicables en el contexto actual. En el pasado, existían aún en las ciudades grandes muy pocas salas de cine y en prácticamente todas se exhibían las mismas dos películas, por lo que era común encontrar a los conocidos que nos podrían llegar a juzgar de perdedores o de mujeres sin moral, actualmente la cantidad de salas de cine y de películas es mucho mayor, y lo que es más importante, muy poca gente conserva prejuicios acerca de las personas que se desenvuelven solas, ya que cada día son más las que viven esa realidad y han comprendido que ello no atenta contra la moral ni es prueba de inferioridad.

Por todo lo expuesto, la única recomendación para alentar a las personas que aún no han experimentado ir acompañadas de sí mismas al cine a que lo hagan, es simplemente buscar la película de su agrado, armarse de valor, ir al cine y centrarse en disfrutar. No hay mejor forma de superar los miedos que enfrentándolos. Seguramente la experiencia será maravillosa en muchos sentidos.

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