Salve sus riñones, controle la diabetes
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• Sufrir de diabetes o hipertensión mal controlados es la antesala para sufrir problemas renales y requerir tratamientos sustitutivos, como diálisis o hemodiálisis, alertan especialistas.
En la mayoría de los casos, la costosa y dolorosa insuficiencia renal crónica podría prevenirse o retrasarse con un control adecuado de ambos padecimientos crónicos, plantean los médicos que tratan padecimientos del riñón.
La diálisis y la hemodiálisis, cuyo propósito es eliminar del cuerpo los desechos de la sangre y el exceso de líquido corporal, son terapias esclavizantes y costosas.
Las estadísticas son muy claras al respecto ya que el 50 por ciento de quienes llegan a requerir las terapias sustitutivas para los padecimientos renales tiene diabetes, o sufre de hipertensión, asegura Luis Eduardo Morales Buenrostro, presidente de la Sociedad Mexicana de Trasplantes.
«La sobrevida de un diabético que inicia diálisis es de dos a tres años, en promedio. Habrá quienes duren muchos años, pero habrá quienes mueran al poco tiempo después de haberla empezado», añadió el especialista.
«En México es muy frecuente que los pacientes lleguen a la atención secundaria, la atención de la enfermedad renal, cuando ya está en etapas avanzadas y cuando la prevención temprana se ha perdido y la posibilidad de atención temprana se ha perdido», señaló Ricardo Correa, jefe del servicio de Nefrología y Trasplante Renal del Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas, Salvador Zubirán.
«No es una condición obligada que un diabético desarrolle insuficiencia renal o que vaya a requerir forzosamente diálisis en algún momento de su vida. Si se trata a tiempo es potencialmente evitable o reversible; lo mismo en el caso de los hipertensos», aseguró.
