Tu zona de confort te impide disfrutar la vida al cien por cien…
• La zona de confort está compuesta por todas las situaciones, buenas y malas, a las que ya estamos acostumbrados y que nos llevan a tener una vida rutinaria, predecible.
Las rutinas aunque a veces poco atractivas nos evitan pensar, cuestionar y tomar decisiones. Actuamos por inercia sin preocuparnos demasiado ni reflexionar sobre lo que hacemos. Vivimos en una zona de confort que es una zona protegida que nos resguarda para evitar que las cosas cambien y seguimos fortaleciendo hábitos que probablemente no sean lo mejor para nosotros.
Continuar en esta burbuja sale carísimo en términos de vida… implica prácticamente renunciar a la vida, al crecimiento.
Continuamos dentro de esta burbuja… mientras los años pasan y nuestras vidas se empobrecen cada vez más.